Un nuevo arrepentido declaró que la empresa Electroingeniería pagó sobornos y que uno de sus dueños y el ministro eran “íntimos”.
Uno de los lobbystas que participó de los “sobornos” que recibieron allegados a Petrobras para realizar negocios en la Argentina declaró que estuvo dos veces con el ex ministro de Planificación, Julio De Vido.
Así consta en la declaración de Fernando Falcão Soares (apodado Fernando Baiano) en la justicia brasileña. En su testimonio, hay tres fotos adjuntas. Dos de ellas son de Gerardo Ferreyra y Osvaldo Acosta, los dueños de Electroingeniería. Esa empresa terminó comprando la parte de Petrobras en Transener. La transacción se informó en US$ 54 millones, pero hubo más dinero para los bolsillos de intermediarios brasileños, que están saliendo a la luz por estos días.
Electroingeniería logró que los brasileños anularan un compromiso para realizar esa venta –la de Transener– con un fondo de inversión estadounidense (Eton Park). Fue luego de diálogos que sostuvieron con Roberto Dromi (ex ministro de Obras Públicas), Nicolás Dromi (su hijo) y Julio de Vido, el ministro de Planificación del kirchnerismo, con directivos y lobbystas de Petrobras.
Según Soares (tanto él como Néstor Cerveró ejercieron tráfico de influencias), De Vido estuvo con ellos dos veces. Una fue en un almuerzo en el hotel Four Seasons con los dueños de Electroingeniería y Dromi, y otra en otro lugar que Soares no recuerda, según su declaración.
Electroingeniería se encargó de realizar el pago de comisiones a quienes habilitaron la operación, según este “arrepentido”. “Acredita que personal de Electroingeniería ha hecho una transferencia bancaria internacional a Jorge Luz (lobbysta de Petrobras, que trabajaba con Soares)”, puntualizó Soares ante el ministerio público federal brasileño.
El mismo testigo de estas irregularidades da cuenta de otra “transferencia internacional de Electroingeniería para una cuenta de Three Lions en Suiza”, que estaba a su nombre.
“Cuestionado si sabe si el ministro Julio De Vido recibió ventaja indebida, respondió que no puede afirmar e incluso oído, pero es una persona de mucha confianza (N. de R: intimidad, dice el texto) de Roberto Dromi y principalmente con uno de los dos socios de Electroingeniería, más específicamente con Ferreyra”, expresa en su testimonio.
“Esa confianza podía ser percibida por la propia relación entre ellos (Ferreyra y De Vido), la forma en la que se saludan, de manera bastante afectuosa y también de las conversaciones entre ellos”, detalla Soares. También señaló que “presenció encuentros con Roberto Dromi, Julio De Vido y Ferreyra sobre este tema”.
Al declarante, le preguntaron si Dromi recibió coimas. “Cree que si. Fue él quien trajo el negocio y no ciertamente no trabajó gratis”, marcó. “Representó al gobierno argentino”, consta en los “términos de colaboración” que tiene el gobierno brasileño.
Los lobbystas vinieron a Buenos Aires más de una vez a tratar el tema de las “comisiones”. “Hubo una reunión con los dueños de Electroingeniería para tratar el tema de las comisiones que fue hecha en la sede de la empresa”, declaró Soares. Los lobbystas (Cerveró por un lado, y Soares- Jorge Luz, por el otro) habrían cobrado US$ 300.000 cada uno, eso se desprende de la declaración de Cerveró.
“Hubo un almuerzo en Buenos Aires donde estuvieron Cerveró, Roberto y Nicolás Dromi, los dos socios de Electroingenería y el ministro Julio De Vido, con un asesor de este último, cuyo nombre no recuerdo”, consta en el testimonio de Soares. Ese almuerzo fue en el hotel Four Seasons. “Fue alquilado un salón anexo al hotel para eventos en un almuerzo exclusivo para esas personas invitadas. Fue una forma para que Julio De Vido esté personalmente con Néstor Cerveró”, relata Soares “Y agradecerle a este último por el compromiso en la solución del problema”, agrega en su testimonio.
Soares no reconoció los nombres de Ferreyra y Acosta ni bien se los mencionaron. Se los tuvieron que mostrar en las imágenes de Google para que el arrepentido pudiera asociar sus caras con las personas. Dromi fue el primero en adelantarles a los lobbystas de Petrobras que el gobierno kirchnerista iba a bloquear la venta de la parte de la brasileña en Transener al fondo Eton. “Dromi comentó que los dueños de Electroingeniería eran muy próximos al gobierno de Kirchner”, dice Soares que escucharon él y Cerveró. “Hubo un contacto telefónico entre Julio De Vido y Néstor Cerveró”, declaró Soares. En esa conversación, el ministro De Vido le confirmó a Cerveró que iba a bloquear la venta de Transener a Eton, según el acta judicial. (Fuente: Clarín - Por Martín Bidegaray).