|
En el transcurso de una conferencia pronunciada esta tarde en la Universidad de Strathclyde, bajo el título 'Los retos energéticos globales: el papel de las renovables', el directivo resaltó "la importancia" de contar con un marco regulatorio "estable, predecible y atractivo que propicie las potenciales multimillonarias inversiones en este ámbito, que contribuirían, además, a alcanzar los objetivos de reducción de emisiones".
En esta línea, Galán desveló la posibilidad de incrementar la potencia de la central hidroeléctrica de bombeo de Cruachan, que actualmente cuenta con 440 megavatios (MW) de capacidad y es la mayor de Escocia, así como de desarrollar nuevos proyectos eólicos marinos --el grupo puso en marcha su primer parque 'offshore', WODS (389 MW), en Reino Unido el pasado mes de octubre y planea una segunda iniciativa, East Anglia One (de hasta 1.200 MW)-- y terrestres.
Galán señaló que las centrales de bombeo son, a día de hoy, "el sistema más eficiente de almacenamiento de energía". Así, "es necesario un marco regulatorio que garantice su viabilidad económica", subrayó.
Además, el presidente de Iberdrola se mostró optimista sobre el futuro de la eólica marina, dadas las positivas perspectivas de reducción de sus costes, aunque hoy son bastante más elevados que los de la eólica terrestre. "Estoy convencido de que se conseguirán significativos descensos en los próximos años", dijo.
Igualmente, Galán expuso que una de las claves de dicha reducción de costes será la utilización de aerogeneradores de mayor tamaño, explicando que ya existen prototipos de hasta 8 MW de potencia.
Asimismo, el presidente de Iberdrola aseguró que es esencial que los gobiernos europeos auspicien modelos energéticos de mercado que propicien la inversión en nuevos proyectos renovables de cara a cumplir los ambiciosos objetivos de reducción de emisiones de CO2 respecto a los niveles de 1990 aprobados por la UE: un 40% para 2030 y, previsiblemente, un 80% para 2050.
Galán hizo también hincapié en la necesidad de crear un mercado efectivo de emisiones de CO2 en Europa, que establezca un precio base para los derechos de emisión, lo que propiciará que se incremente la competitividad de las fuentes renovables sin provocar distorsiones.