EnergyPress / Video
x
NQN
CRD
MDZ
Neuquén
Miércoles 28/08/2013
Temp: 5°
Viento: 0 Km/h
Despejado
WTI
USD 109.01
Oro
USD 1420.60
Cobre
USD 3.33
Dólar
$ 5.64
Euro
$ 7.55
Petróleo y Gas
Neuquina
Martes 20 Agosto 16:16
Acuerdo Chevron-YPF: "Lo que no se puede hacer es ignorar la globalización"
El diputado neuquino Luis Sapag opinó sobre el convenio que está tratando la provincia para el desarrollo de 396 kilómetros cuadrados de la formación Vaca Muerta.

Califique este artículo

Por Luis Sapag (*)

La discusión mediática y legislativa sobre el acuerdo Neuquén-YPF-Chevron para la explotación de un sector de la formación geológica Vaca Muerta se ha centrado, como no podía ser de otra forma, en aspectos legales, ambientales y tecnológicos. Sin embargo, existe otro plano de análisis que sólo se ha tocado tangencialmente: la importancia de dicho proyecto para rediseñar los contenidos y la escala del posicionamiento de Neuquén en las relaciones políticas, económicas y culturales a nivel global. No se trata de desvalorizar las dudas generadas por los efectos ambientales sino de que, por el contrario, a través de controles estrictos y severos, no se desatienda el futuro energético de la provincia y se cree una cantidad significativa de puestos de trabajo. De hecho, ya hay una experiencia de casi 300 pozos realizados con estimulación hidráulica en Neuquén, en la que se pusieron a prueba las normas dictadas específicamente para el manejo de aguas para fracking y el procesamiento de los líquidos contaminados de retorno (flowback), aspectos de un proceso de mejora continua en el que se encuentran comprometidos entes reguladores y empresas.

Tampoco se pretende dejar de lado el análisis del desactualizado y fragmentado conjunto de leyes nacionales y provinciales, lo que ha motivado encendidas discusiones ciudadanas y políticas. Muy por el contrario, se está trabajando activamente para desarrollar una nueva legislación sobre hidrocarburos que contemple el drástico cambio que imponen estos recursos no convencionales y que despeje toda duda al respecto. El actual debate legislativo es el primer paso en esa dirección. Sobre la base de esos avances institucionales, productivos y preventivos se pueden pensar y planificar estrategias de inserción en los espacios mundiales de intercambios de bienes materiales (económicos y financieros) y culturales (conocimientos científicos y tecnológicos; redes sociales reales y virtuales; actividades artísticas y deportivas).

Hay distintas maneras de articularse a la globalización, lo único que no se puede hacer es ignorarla, pues de uno u otro modo los poderes y formas comunicacionales que sobrepasan las fronteras nacionales igualmente penetran las conciencias y vivencias de regiones, pueblos, familias y personas. De allí que haya dos posibilidades básicas para sistemas sociales periféricos como Argentina y Neuquén: o dejamos que esos poderes hagan la suya sin limitaciones (globalización pasiva) o actuamos desde nuestras potencialidades y fortalezas (globalización activa) para diseñar estructuras que facilitarían la inclusión de todos los actores (universidades y municipios; trabajadores y ONG; superficiarios y mapuches, entre otros), con incrementos en la calidad de vida y el desarrollo. Así lo hacen tanto el comunismo chino y los socialismos boliviano y bolivariano como los capitalismos estatalistas mexicano, brasileño y noruego. Todos explotan los hidrocarburos con modelos mixtos estatales y privados, donde las agencias oficiales regulan precios, normas y cuotas de retención de rentas. Y aseguran que los nuevos conocimientos, beneficios y riquezas sean distribuidos según metas sociales.

Dentro del fragmentado espectro normativo, es de destacar que la ley nacional de Soberanía Hidrocarburífera cumple un papel relevante: coloca el gas y el petróleo como bienes de interés público y define el marco jurídico para un posible equilibrio entre la necesidad empresaria y la necesidad social, con el Estado como garante, planificador y productor a través de YPF. Neuquén aporta dos elementos fundamentales: la autoridad de concesión y su propia empresa GyP, lo que le permite imponer condiciones básicas a la entrada de las operadoras nacionales y extranjeras. Precisamente, el acuerdo Neuquén-YPF-Chevron es el primer ensayo de un nuevo modelo de globalización activa Provincia-Nación-empresas multinacionales. No sólo se trata de la escala de explotación –pasamos de decenas a centenares de pozos mensuales–, también es el comienzo de nuevas articulaciones de los neuquinos con todo el mundo, a través de unidades académicas, entidades culturales y de cuidado del medioambiente, redes productivas y de negocios, no ya como habitantes de "zonas de sacrificio" sino como actores globales al mismo nivel de conocimientos y de gestión del desarrollo socioeconómico.

(*) Doctor en Ciencias Sociales, diputado provincial MPN. Presidente de la Comisión de Energía de la Legislatura neuquina

Comentarios Este espacio de discusión y opinión que le brinda EnergyPress, debe ser usado para que divulgues tus inquietudes, reclamos y opiniones de manera honesta y constructiva para un buen uso de este portal. No será admiitdo ningún tipo de expresión que vaya en detrimento de raza, nacionalidad, condición social o sexo porque no es el contexto de discusión de este espacio. Los comentarios que divulguen insultos, injurias, calumnias o denuncias no documentadas tampoco serán admitidas en forma anónima y en lo posible tampoco de forma registrada. Cualquier tipo de expresión que contenga los temas anteriormente mencionados serán moderados siempre y cuando parte de ello sea constructivo a la dicusión, omitiéndose o tachándose de acuerdo a lo convenido anteriormente. Si vas a exponer tus ideas, te invitamos a que lo hagas libremente dentro de un marco responsable. Para ello, acepta estos términos y condiciones.
Acepto Términos y condiciones