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Una de las variables determinantes del mercado de los combustibles, el precio, giró 360 grados desde que el Gobierno Nacional expropió a Repsol en YPF, para tomar el 51 por ciento de las acciones, y por ende, el control de la compañía. Desde entonces, crecieron a un ritmo superior del 40 por ciento en todas sus variantes. Incluso este año podría hacerlo a un 50, de acuerdo a los cálculos que realizan expertos de la actividad.
Estas modificaciones trajeron como consecuencia nuevos hábitos de consumo y comerciales. Ya no hay preocupación de los usuarios por llenar el tanque, por el contrario, prima una minuciosa preferencia por las estaciones que despachan a bajo costo, en puntual las de YPF.
En lo que respecta a ventas, cae el consumo de los productos Premium, al mismo tiempo que son sustituidos por los de menor calidad, como la nafta súper y el diésel D500. De acuerdo a datos de la Secretaría de Energía en julio se desplomó la nafta ultra en un 10,3 por ciento en relación al mismo período de 2013.
Gonzalo Rodríguez, presidente de la Cámara de Comerciantes de Derivados de Petróleo, Gas y Afines (CAPEGA) explica para los operadores “implica una disminución de la rentabilidad” debido a que las variedades con mayor octanaje ofrecen mejor margen que los más baratos.
En cuanto a precios, los Premium se distancian ahora en un rango de 40 centavos a un peso, dependiendo del local y bandera que se tome como referencia. Se acortó la brecha para no bajar tanto las ventas y mantener el modelo de negocios. En la zona norte YPF tiene una participación de mercado del 60 por ciento, seguida por Refinor, Shell y Oil Combustibles.
Ricardo Stella, presidente de la Cámara de Expendedores de Salta agrega que esta novedad se suma a la necesidad de vender con tarjetas de débito y crédito, por escasez de efectivo, y a la caída “de entre un 10 y 15 por ciento de los despachos” motivado en el freno que presenta la economía en su conjunto.
Respecto del abastecimiento Stella reconoce que “las compañías están operando sin inconvenientes”. Asegura que “se repite la misma situación que en el resto del país, donde la YPF entrega en tiempo y forma, sin límites en los pedidos de combustible, con lo cual se satisface a la demanda ampliamente”.
fuente: surtidores