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La industria petrolera de Cuba solo explota cinco por ciento del petróleo en sus yacimientos en tierra firme y aguas someras, por la falta de capital extranjero y tecnología para acometer desarrollos como el del campo de Varadero 1000, el mayor realizado hasta ahora.
“Tomamos lo que la roca entrega libremente (crudo y gas asociado), que equivale a cinco por ciento del potencial”, dijo a medios internacionales María Yodalis Hernández, jefa de negocios de la estatal Empresa de Perforación y Extracción de Petróleo del Centro (Epepc), en esta ciudad a 150 kilómetros al este de La Habana.
IPS, publicó que la nueva apertura con Estados Unidos “nos da la posibilidad de demostrar que Cuba tiene oportunidades petroleras”, aseguró sobre el deshielo entre La Habana y Washington, que ya cristalizó en el restablecimiento de relaciones diplomáticas y la apertura de embajadas.
“Los principales recursos y la tecnología de punta de la industria petrolera surgen en Houston, Estados Unidos”, abundó la experta.
Como otros funcionarios del ramo, reiteró que este país insular está abierto “a todo tipo de negocios” con empresas estadounidenses, algo imposible aún por el embargo impuesto a la isla desde 1962.
Con el mismo nombre del balneario internacional que colinda con Cárdenas, el yacimiento Varadero tiene actualmente 90 pozos en explotación.
Desde su descubrimiento en 1971, “ha producido sobre 185 millones de barriles hasta el cierre del 2014”, amplió la experta durante un recorrido por las instalaciones.
“Noventa y cinco por ciento (de los hidrocarburos) queda sin extraer porque nuestra empresa todavía no ha logrado poner en práctica ningún método secundario de explotación”, indicó. “Se requiere de una inversión bastante fuerte en una zona geográfica muy delicada desde el punto de vista medioambiental”, acotó.
Hernández se refirió a los peligros de incrementar la actividad petrolera y afectar los 22 kilómetros de playas paradisíacas del mayor polo turístico de Cuba, que aportó 38 por ciento de los 2.700 millones de dólares percibidos en 2014 por la industria del ocio.
Estos y otros conflictos marcan el sector de la energía, en cuyos hombros pesa la meta de modernizarse y ser sostenible con más participación de las fuentes renovables, para responder a los planes de reactivación económica impulsados desde 2008 por el gobierno de Raúl Castro.
María Yodalis Hernández, jefa de negocios de la estatal Empresa de Perforación y Extracción de Petróleo del Centro, en el Centro Colector 10, en Cárdenas, en la provincia cubana de Matanzas.
La única experiencia de extracción secundaria en yacimientos cubanos se desarrolla desde diciembre pasado en Boca de Jaruco, a 40 kilómetros al este de La Habana, un campo seleccionado por ser uno de los más antiguos y en activo desde fines de los años 60.
Allí especialistas de China y Rusia, además de Cuba, aplican a las condiciones locales la técnica internacional de estimulación térmica. Consiste en echar vapor de agua en las capas de la roca para que disminuya la viscosidad del crudo y pueda ser extraído con facilidad o brote como resultado de la presión natural.
Aguas profundas
El presidente de Cupet, Osvaldo López, anunció el 21 de este mes que el país iniciará una campaña de perforación en aguas profundas del Golfo de México, a fines de 2016 o comienzos de 2017, con participación de Petróleos de Venezuela (Pdvsa) y la angoleña Sonangol.
La perforación exploratoria será a 7.000 metros de profundidad y hasta 3.000 metros costa afuera, en un área donde Cuba proyecta que hay reservas por 20.000 millones de barriles, aunque investigadores estadounidenses reducen la estimación a 5.000 millones.
En 2012, tres pozos exploratorios en aguas profundas resultaron secos.
“Hay que investigar el método adecuado para nuestro petróleo, además de mantener una inversión bastante fuerte por años”, especificó Hernández, en el Centro Colector 10, una unidad que extrae 1.500 barriles diarios y separa en un proceso hermético el gas asociado en pozos del yacimiento Varadero.
La Epepc “se compone de ocho centros colectores más como este”, donde se contratan sobre todo a personas de la localidad, explicó a IPS el ingeniero Miguel Sotolongo, jefe del taller de extracción de la empresa que obtiene diariamente 27.000 barriles de crudo y 900 metros cúbicos de gas natural.
Mediante un proceso hermético y certificado por las autoridades ambientales, las unidades extractivas aprovechan hoy ese volumen de gas natural, que hace pocos años se quemaba. Además de la pérdida del combustible, esa práctica dañaba la salud humana e inundaba con un desagradable olor la ruta obligatoria para entrar al balneario.
Con 41 empresas, de las cuales cinco tienen capital extranjero, el grupo estatal Unión Cuba Petróleo (Cupet) produce al día aproximadamente 68.500 barriles de petróleo equivalente, 52.000 barriles de crudo y tres millones de metros cúbicos de gas natural.
Fuente: elmundo.com.ve