|
Para un especialista, la estrategia de YPF con Vaca Muerta "dio resultado" y abrió el camino a inversiones
El presidente del Instituto Argentina del Petróleo y el Gas, Ernesto López Anadón, afirmó que la estrategia de la petrolera YPF en favor del desarrollo del yacimiento de Vaca Muerta "dio resultados" y permitió que en la actualidad exista "una masa de posibles inversiones" interesadas en explotar esos recursos no convencionales.
A pesar del potencial que resalta del yacimiento existente en la cuenca neuquina, López Anadón señaló que en el actual contexto local e internacional "el gas con una ecuación diferente al petróleo ofrece una enorme oportunidad en Argentina y una gran posibilidad de desarrollo tanto en tight gas como en el shale gas".
El titular del IAPG consideró, en declaraciones a Télam, que la petrolera nacional "desde que anunció que iba a avanzar con el proyecto de Vaca Muerta, consiguió sus socios y acordó en con Chevrón, con Dow y más recientemente con Petronas, por lo cual la estrategia dio resultados".
En ese sentido, a partir de las inversiones desarrolladas en los últimos años en Loma Campana o El Orejano, "YPF pudo anunciar aumento de producción; abrió el campo para decir que Vaca Muerta produce, que es explotable y se puede armar un proyecto a partir de eso. Hay muchas compañías que vinieron a posicionarse y que representan una masa de posibles inversiones que están evaluando la exploración".
A pesar de ese punto de partida, López Anadón entendió que en materia de recursos no convencionales en Argentina "la actividad sigue siendo muy poca respecto del potencial de desarrollo, pero a estos niveles sería razonable continuar con esta actividad", en referencia al contexto internacional de precios muy depreciados respecto a un año atrás.
Una explotación masiva de Vaca Muerta permitiría cubrir la demanda de recursos del país y generaría un excedente que sólo se podría viabilizar mediante la exportación a precios internacionales, hoy apenas por encima de los 30 dólares, con lo cual la explotación del recurso pasaría a ser deficitaria respecto a sus costos de producción.
"Si hay excedente, esa producción va a precio internacional y si los proyectos no dan rentabilidad las empresas van a bajarlos" explicó el directivo del IAPG tras considerar que con un valor del barril de crudo en el mercado interno a unos 60 dólares, es "un precio que hace razonable la producción convencional y permitiría incluir a muchos proyectos de no convencional".
No obstante, aclaró que "llegar a la etapa de desarrollo masivo de Vaca Muerta requiere masas de inversiones mucho mayores a las conocidas hoy, incluso se calcula que entre infraestructura, transporte, perforación y plantas, la inversión demandada podría llegar a los 20.000 millones de dólares al año".
Si bien el precio internacional del crudo condiciona el pleno desarrollo de la cuenca "las compañías no dijeron que iban a reducir sus proyectos sino que van a seguir trabajando", pero aclaró que "lo ideal es tratar de poner las cosas de manera de poder llegar al nivel de explotación que tuvieron los mismos tipos de cuencas en Estados Unidos".
El director del Centro de Estudios de Energía, Política y Sociedad (Ceepys), Víctor Bronstein, también destacó que "el potencial grandísimo de Vaca Muerta salva al país de estar condenados a ir perdiendo el autoabastecimiento", pero su desarrollo "requiere un precio que hoy no hay" en el mercado internacional.
La decisión de mantener un precio de barril interno más alto al externo "ayuda a que se siga desarrollando este tipo de recurso aunque ahora se van a hacer mas lentas las inversiones que hacen falta", pero destacó la importancia de sostener el nivel de producción al señalar que "las provincias petroleras dependen en sus presupuestos de las regalías, que tienen que ver con el precio del crudo".