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Altran España ha contribuido al cumplimiento de este reto de la aeronáutica con el diseño, la fabricación y el desarrollo del MAS (Monitoring and Alerting System), una herramienta completamente innovadora que ha permitido la monitorización permanente del piloto automático cuando estaba activado, y de los equipos y sensores del avión.
En el supuesto de que pudiera ocurrir un cambio inesperado en el comportamiento del vuelo o un fallo de uno de los sistemas, el MAS habría desconectado inmediatamente el piloto automático, alertando al piloto y al director de la misión. El MAS ha sido crítico sobre el océano Pacífico, ya que en estos vuelos de varios días, el piloto ha tenido que dedicar tiempo a descansar, comer, atender a la prensa, etc. Además, Altran ha contribuido al desarrollo del piloto automático, el SAS (Stability Augmentation System), que se ha incorporado al Solar Impulse 2.
Para el Si2, el equipo Flight Strategy de Altran ha trazado las rutas de vuelo del avión en esta extraordinaria odisea desde el Centro de Control de Misión (MCC), a través de un sistema especial de cálculos matemáticos desarrollados por el propio equipo. Su misión ha sido explorar las posibilidades de vuelo y desarrollar estrategias optimizadas para que el director de vuelo recibiera un flujo constante de información para el proceso de toma de decisiones.
El innovador sistema de cálculo se ha diseñado para simular las mejores oportunidades de despegue y asegurar las conexiones de vuelo más óptimas, además de acceder a los márgenes de seguridad y nivel de riesgo. Altran además es responsable de los análisis de seguridad del avión, que son los que permiten obtener la autorización de vuelo, obligatorio para este tipo de vuelos.
Este vuelo ha sido el más largo jamás realizado únicamente con energía solar, en términos de distancia y tiempo. No sólo se trata del primero en la historia de la aviación sino que también es el primer vuelo de varias jornadas para Solar Impulse. Todo un reto, ya que Borschberg ha permanecido 4 días y 22 horas en la cabina del Si2, expuesto a condiciones extremas. Volar a través de océanos sin combustible significa colocar la energía renovable al límite.
Después de 12 años de investigación, desarrollo, simulación y entrenamiento, este vuelo ha sido el momento de la verdad para los co-fundadores de Solar Impulse, Bertrand Piccard y André Borschberg y para todos aquellos que se han unido desde los orígenes al proyecto, como es el caso de Altran.
Fuente: Evwind.com