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Los pequeños y medianos productores de Río Negro atraviesan un momento complicado, es por ello que desde el sector reclaman una pronta solución.
“Necesitamos un funcionario con decisión política que resuelva el conflicto de una vez”, sostuvo el referente de la Cámara de productores de Allen, Sebastián Hernández, publicó el portal Va con firma.
Asimismo, Hernández anticipó que viajarán a Buenos Aires para exigir un encuentro con el presidente de la Nación, Mauricio Macri, y argumentó: “La situación en las chacras es muy complicada, está finalizando el periodo de poda, y hasta el momento no hemos recibido respuesta de nadie”.
Por su parte, el titular de la Cámara de Productores de Fernández Oro, Carlos Zanardi, ratificó la idea de manifestarse en Buenos Aires, puntualmente se dirigirán a la Plaza de Mayo donde tienen previsto entregar fruta frente a la Casa Rosada.
Antes de viajar a Capital Federal, los productores intentarán mantener una reunión con el intendente de Cipolletti, Aníbal Tortoriello, para que les gestione un encuentro con referentes de Nación. “Entendemos que es el hombre fuerte de Cambiemos en la zona y es referente comprometido con la fruticultura”, sostuvo Zanardi al tiempo que agregó: “Queremos que el presidente Macri sepa que no somos revoltosos, sino productores frutícolas que queremos hacer conocer nuestra situación de crisis”.
Tanto los pequeños como los medianos productores destacan que la situación que atraviesa el sector ya es insostenible y necesitan de la presencia de Nación para tener la rentabilidad necesaria y seguir subsistiendo, porque esta actividad económica para los pequeños y medianos productores está en cuerda floja.
Durante los primeros meses del gobierno macrista se pusieron en marcha diversos cambios de índole económico para las economías regionales, uno de ellos fue la quita de las retenciones. En este contexto se especulaba con que se produciría un derrame desde las grandes empresas exportadoras hacia los productores, no obstante nada de eso sucedió y esta actividad atraviesa su momento más crítico y duro, especialmente para los pequeños y medianos chacareros.