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A más de dos meses de la determinación de la gobernación bonaerense de suspender el servicio de Ferrobaires, persiste la incertidumbre en torno a la reactivación de los ramales que estaban bajo la órbita del Estado provincial y que fueron transferidos a la Nación.
Ante esto, en la Cámara Alta nacional, el senador Juan Manuel Abal Medina presentó un proyecto solicitando informes “sobre diversas cuestiones relacionadas a la suspensión de los servicios ferroviarios prestados por la unidad ejecutora del programa ferroviario provincial”.
Al mismo tiempo, pedidos de informes similares se impulsan de forma creciente en diversos distritos bonaerenses, donde el reclamo de trabajadores y usuarios de este servicio ha desembocado en los recintos deliberativos.
El interior se levanta
En Tandil el legislativo local resolvió enviar una nota al ministro de Transporte de la Nación, Guillermo Dietrich, y al subsecretario de Transporte Ferroviario, Arturo Papazian, “para que instruyan a las autoridades ministeriales competentes para que, en el marco de la transferencia a la Nación de los servicios ferroviarios oportunamente concesionados a la Provincia de Buenos Aires, procure no afectar la estabilidad de los trabajadores de la empresa Ferrobaires y principalmente, ordene de manera urgente el pronto restablecimiento del servicio Tandil-Constitución, como así también, la continuidad del Tren Turístico Vela-Gardey; siempre y cuando se garanticen las medidas de seguridad tanto para los trabajadores como para los usuarios”.
En Daireaux, los ediles del bloque Cambiemos-UCR Jorge Munarris, Martin Fernández y Andrés Redondo anunciaron el impulso de un petitorio que será presentado al presidente Mauricio Macri y que solicita que “se pueda restablecer de manera urgente” el servicio en el ramal que desemboca en dicha ciudad y que, además, atraviesa 21 localidades repartidas entre los partidos de Lobos, 25 de Mayo y Bolívar. “La Juventud Radical saldrá a hacer firmar personalmente a instituciones y comunidad en general”, destacaron.
Se remarcó asimismo que, lo largo de la traza, dicho ramal “une pequeños pueblos rurales que utilizan a diario el servicio, en muchos casos siendo el único medio de transporte para comunidades alejadas”. “Genera impotencia y tristeza en los habitantes que se encuentran a las veras del ferrocarril. Las oportunidades se escapan cada día que pasa y el servicio no es restablecido”, se apuntó en el petitorio que tendrá como destino la Casa Rosada.
En tanto, en Bahía Blanca, todos los sábados hasta finales de septiembre, se disponen mesas en las semipeatonales de la ciudad y plaza Rivadavia para la recolección de adhesiones en la campaña que busca el retorno del tren “que simboliza el progreso, comunicación entre los pueblos, impulsor de las economías regionales y locales”.
Al respecto, uno de los impulsores de este reclamo, el ex concejal bahiense Eduardo Matarazzo, comentó: “La campaña incluye visitas a gremios, ONG’s y sectores políticos ligados e interesados a la problemática ferroviaria”.
En el petitorio, se exige “el restablecimiento del servicio de Ferrobaires entre Buenos Aires y Bahía Blanca, en pleno funcionamiento y condiciones dignas y seguras de traslados; servicio nuevo de tren urbano Bahía Blanca entre Ing. White y Conicet y servicio nuevo interurbano Bahía Blanca - Punta Alta”.
Asimismo, en la comarca serrana que comprende los distritos de Tornquist y Coronel Pringles, trabajadores ferroviarios, vecinos e instituciones se reúnen semanalmente y crearon interacciones mediante las redes sociales, al tiempo que también promueven un petitorio exigiendo el restablecimiento del servicio, documento que prevén presentarlo a la Defensoría del Pueblo de la Nación y a su par de la Provincia de Buenos Aires.
¿Respuesta oficial?
Sin embargo, las señales son poco alentadoras por parte del gobierno nacional. El ministro de Transporte Guillermo Dietrich declaró a Télam que el regreso del tren está supeditado a la culminación de una auditoría integral de recursos humanos, algo que, afirmó, “hasta el momento está dando resultados muy malos” debido al “proceso de degradación creciente, sobre todo en los últimos años”.
También cabe señalar que el jefe de Gabinete Marcos Peña manifestó que “no es posible determinar una fecha de restitución de los servicios” e indicó que el pasado 11 de julio se inició el proceso de transferencia desde la órbita de la Provincia a la Nación y que esto está fijado por un plazo de 180 días prorrogables.
Bajo este escenario, la preocupación no sólo afecta a los usuarios de estos servicios sino, fundamentalmente, a los trabajadores que ven con inquietud la manera en que el traspaso a la Nación y el nuevo plan ferroviario puede llegar a afectar a su estabilidad laboral.