|
'The Independent' entona "Paren las rotativas!" en su última portada; el réquiem por su edición impresa, al cabo de 30 años, (1986-2016), desde el ocaso de la era Thatcher al "ser o no ser" en Europa de la era Cameron, pasando por el ocaso y caída de Tony Blair.
"El periodismo ha cambiado más allá de lo reconocible durante la vida de este periódico", escribe el editor, Evgeny Lebedev, en el momento de la despedida de la versión en papel The Independent. "Los periódicos deben de cambiar también, adaptándose a las tecnologías y a los hábitos que nuestros valientes fundadores no pudieron prever".
Al cabo de más de 10.000 números, por debajo del listón de los 100.000 ejemplares y con pérdidas de más de 30 millones de euros anuales, el periódico de calidad que sirvió de revulsivo al centro-izquierda, codeándose con The Guardian y desafiando al poderoso "imperio" de Rupert Murdoch, desaparece de los quioscos para volcarse en la renovada edición digital.
"The Independent se está convirtiendo en un medio global, digital y rentable", asegura Lebedev, que se ha visto obligado sin embargo a menguar notablemente la plantilla de 150 periodistas y a vender simultáneamente el i, la versión comprimida y low cost que inicia una andadura separada en papel.
"Los periódicos van a sobrevivir aún por un tiempo en el Reino Unido, especialmente los fines de semana", vaticina por su parte el último director The Independent, Amol Rajan. "Pero a largo plazo, el formato de papel diario está ya muerto".
Más 9.700 árboles se salvarán todos los años gracias al "papel" ahorrado por la nueva edición digital de The Independent, que por el módico precio de dos libras regaló a sus lectores un último número histórico, con un repaso muy especial a las tres últimas décadas, y una última exclusiva: el plan secreto y frustrado de Muamar el Gadafi para asesinar al rey Abdullah de Arabia Saudita en el 2003.
The Independent, conocido popularmente como The Indy, fue creado en octubre de 1986 por tres ex periodistas de The Daily Telegraph(Andres Whittam Smith, Stephen Glover y Matthew Symonds). Fiel a su espíritu de "independencia editorail de los partidos políticos y de los poderes económicos", llegó a tirar 400.000 ejemplares en su momento álgido en los años noventa.
En el 2003 cambio de formato (de sábana a tabloide) y marcó el camino de modernización de los periódicos británicos ante la competencia de internet. El periódico tardó sin embargo es subirse a la revolución digital y perdió notablemente terreno en su versión online.
"La tecnología que nos permitió establecernos ha hecho que la versión impresa sea inviable al cabo de 30 años", reconoció su editor, Evgeny Lebedev, hijo del oligarca ruso Alenxander Lebedev, y también propietario del periódico gratuito y vespertino por excelencia en Londres, The Evening Standard.