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El abogado del Ministerio de Gobierno, Mauricio Gutiérrez, entregó una nómina de 12 dirigentes mineros que en este momento son tomados como prófugos y la lista la encabeza el polémico Josué Caricari, quien puede ser el principal instigador de la turba que acabó con la vida del viceministro Rodolfo Illanes.
El fiscal Marco Antonio Vargas dijo que uno de los aprehendidos reveló varios detalles de lo que sucedió ese día en el cerro Pucará donde fue ajusticiado Illanes y que por eso debía guardarse la reserva del caso.
El abogado del Ministerio de Gobierno dijo que tanto Carlos Mamani, presidente de la poderosa Federación Nacional de Cooperativas (Fencomin), como su vicepresidente, Agustín Choque Mamani, que ayer también fue remitido al penal de Chonchocoro, fueron partícipes y responsables directos de la muerte del viceministro.
Incluso entregaron una llamada grabada entre un jefe policial y Agustín Choque, cerca de las 17:00, del jueves, en la que el dirigente confirma que el viceministro ya no estaba con vida.
En la audiencia del sábado, que duró hasta ayer a las 6:05, los fiscales revelaron que incluso los dirigentes intentaban negociar la salida de los 10 mineros encerrados en San Pedro desde el 14 de agosto, a cambio de entregar el cuerpo de la fallecida autoridad.
De esos hechos acusaron a los dos principales dirigentes de Fencomin, Carlos Mamani y Agustín Choque. El abogado de este, en su audiencia, dijo que su cliente fue el que pidió “no tocar” a la autoridad y también exigió que no se tocara nada del vehículo que transportaba a la autoridad, lo que no pudo lograr por la belicosidad de los mineros, que habían decidido retener y secuestrar a Illanes.
“Rogó por su vida y pidió al comandante de la Policía no avanzar”, dijo Choque, antes de ser recluido en celdas judiciales anoche, cuando se le consultó cuáles fueron las últimas palabras del viceministro.
Según la declaración del ahora detenido, un pariente del minero fallecido fue el que alentó a la muchedumbre para tomar represalias por el minero muerto y dijo que los miembros de esa cooperativa, no identificó el nombre, fueron los que arremetieron contra la autoridad y que los dirigentes no pudieron hacer nada porque fue sacado a empujones del lugar por los alterados mineros.
Conspiración
Pese a la teoría del Gobierno sobre una conspiración, en la audiencia, tanto los abogados del Ministerio de Gobierno como de la Policía Nacional, ni siquiera mencionaron esta hipótesis, es más, se sumaron a la querella de la Fiscalía que imputó a los acusados de seis delitos: asesinato, encubrimiento, asociación delictuosa, robo agravado, portación ilícita de explosivos y atentados contra organismos de seguridad del Estado.
Declaraciones
Los fiscales revelaron que tanto el teniente Iván Linares, edecán de Illanes, como el chofer del mismo, Rubén Israel Quisbert, prestaron sus declaraciones e identificaron a varios dirigentes ahora prófugos.
Otra declaración determinante fue la del corregidor de Panduro, Eleuterio Huaranca, quien relató cómo lograron trasladar el cuerpo del teniente Linares y por qué no pudieron hacer nada por la vida del viceministro.
La defensa
Los abogados defensores explicaron que, pese a esas declaraciones, ninguno señala a los acusados ni los identifica como plenos partícipes del hecho criminal.
Se demostró que Carlos Castro Manuel y René Cochi estaban en reuniones con el ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, cuando se produjeron los hechos y el abogado Roberto Durán demostró que no es asesor de Fencomin como lo acusa la Fiscalía.
Fuente: http://www.eldeber.com.bo/ Marco Chuquimia / La Paz