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Colombia podría minimizar la posibilidad de apagón en el país
Los apagones generados la semana pasada volvieron a despertar el temor de los zulianos de lo que representó el esquema de racionamiento implementado durante dos meses este año mientras se esperaba la recuperación del embalse de Guri. Pero, del otro lado de la frontera podría estar una pequeña solución de bajo presupuesto.
Cada megavatio cuenta y una infraestructura de interconexión entre Colombia y Venezuela existe. 150 megavatios (MW) se pueden enviar hasta el estado Zulia y 150 MW a Los Andes, un alivio de al menos 300 MW para el país. “Esto no sería suficiente para llegar a racionamiento cero, ya que la capacidad de las interconexiones es limitada”, afirma José Aguilar, consultor internacional en energía eléctrica.
Pero, reconoce que comprar energía a Colombia podría minimizar la posibilidad de un apagón generalizado en el país. Además, representaría un gasto menor al costo de producción local quemando diésel y funcionaría como apoyo para los embalses de Los Andes, que, del mismo modo que sucedió con el Guri, también fueron afectados por el fenómeno El Niño.
Aguilar explica que comprar a Colombia no requiere de inversión, sino solo de un convenio de pago. “Si Venezuela fuera miembro del Pacto Andino ese precio sería menor, tal es el caso hoy entre Colombia y Ecuador”, lamenta. La transacción reduciría 2,4 por ciento los racionamientos que podrían venir con las temporadas de mayor demanda del año, esto si excluyendo a Guayana, el consumo del país fuese de 14 mil MW.
El ingeniero critica que el país haya retrocedido más de una década en materia de consumo y demanda de electricidad. “Tan mal estamos que si mañana quisiéramos reactivar el aparato productivo el Sistema Eléctrico Nacional entraría en barrena”. Percibe como la única solución la recuperación de megavatios térmicos, una tarea que el Gobierno ha paralizado desde el final del Plan de Administración de Carga.
Posible apagón
El consumo de energía de Venezuela debería ser como mínimo de 20 por ciento por parte de Guayana, sede de las industrias básicas y el 80 por ciento, del resto del país. “En la actualidad eso está descuadrado porque la proporción es 10 % y 90 % respectivamente”.
Si se espera una demanda de 16 mil 700 MW para el resto del año, la repartición sería de mil 670 MW de Guayana y de 15 mil 30 MW fuera del estado Bolívar. Pero, la Red Troncal de Transmisión (RTT) desde Guayana solo permite el envío de siete mil 700 MW hacia el resto del país por lo que en oriente, centro y occidente, se requeriría la disponibilidad de siete mil 400 MW para minimizar el riesgo de un apagón generalizado, explica Aguilar.
“De este requerimiento fuera de Guayana, solo unos 600 MW podrían ser suplidos por las hidroeléctricas andinas dejando al parque térmico en responsabilidad de suministrar seis mil 800 MW. Por eso es que importar 300 MW de Colombia ayudaría a pasar el escollo”, ratifica el experto.
Si el Gobierno envía más de ocho mil 700 MW a través de la RTT, haría más probable un apagón de múltiples estados, pronostica. La energía y potencia adicional, solo la podría suministrar el bajo Caroní, ejerciendo mayor presión en el embalse de Guri.
Cualquier disponibilidad térmica inferior a los seis mil 800 MW hace el país vulnerable a racionamientos de dos bloques por no contar con suficiente potencia para cubrir la demanda, insiste. “El no querer racionar a la Gran Caracas agrava el cuadro para el interior. En la actualidad la capital tiene una tajada de Guri de más de 800 MW, porque ‘a ellos no les puede faltar la luz’”.
Fuera de Guayana
17.919 son los MW térmicos instalados.
1.159 son los MW hidroeléctricos instalados.
19.078 MW es la capacidad total instalada en el país.
6.000 MW son los únicos que funcionan.
68 % es la indisponibilidad de MW en el país. Fuente: La Verdad
Fuente: https://informe21.com