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Informática Fueguina Sociedad Anónima (IFSA) surge de la alianza estratégica entre el grupo BGH y la firma brasileña “Positivo”. Desde el 2006, esta empresa, “Positivo BGH”, se dedicó a ensamblar notebooks y tablets en Tierra del Fuego en el marco de la ley de promoción industrial. Hasta ahora fueron denunciados 162 despidos. Pero la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) alerta que las cesantías anticipan el cierre de la fábrica. IFSA se dedicaba a fabricar las netbooks para el plan Conectar Igualdad, desmantelado por la gestión del presidente Mauricio Macri.
En entrevista con Radio Sur, el secretario general de la UOM-Río Grande, Oscar Martínez, analizó causas y consecuencias de la política de apertura de importaciones y los peligros de la falta de promoción a la industria en la provincia.
-¿Qué pasó en IFSA?
– Producto de la política que ha venido llevado adelante el gobierno nacional, sobre todo con las últimas medidas que implican la no protección de la industria argentina en materia de notebooks y tablets, la empresa ha decidido el cierre de sus puertas. Y eso va a ser al final de una producción que ya está determinada y que está en sus momentos finales. Se calcula que podría ser a mediados de diciembre. Y como consecuencia de ello un número más que considerable de trabajadores y sus familias van a quedar sin su garantía de estabilidad laboral, con el riesgo potencial de ser expulsados prácticamente de la Tierra del Fuego.
A raíz de esto, el viernes a las 6 de la mañana, habiendo hecho una asamblea, como es habitual, la totalidad de los trabajadores decidieron mantenerse sin prestar ningún tipo de servicio, en situación de asamblea permanente. A estas horas estamos analizando la profundidad de otras medidas, que serán resueltas por el congreso de delegados de la seccional.
- En el diario La Nación publicaron un artículo titulado “Tierra del Fuego: cambiar para sobrevivir. La única forma de superar la crisis”. Y agrega en la bajada: “Símbolo del modelo productivo kirchnerista, enfrenta miles de despidos; Bertone negocia con el macrismo y las empresas”. ¿A qué cambio apunta? ¿Qué es lo que negocia la gobernadora Rosana Bertone con el macrismo?
– Primero decir que creemos que este tipo de informes y editoriales que son casi habituales en los últimos meses en la gestión del actual gobierno, apuntan a atentar contra un logro y una conquista histórica que tenemos los habitantes de la provincia de Tierra del Fuego, que data de muchos años atrás, 44 años de vigencia de la ley 19.640 de exención impositiva. De ello que se deriva un subrégimen de promoción industrial con la mismas características que el que tiene el de Manaos en Brasil y que está enmarcados en un convenio, en un acuerdo de discusión que se celebró en Ouro Preto en el marco del Mercosur.
Algunos hablan desde una investigación muy rápida, muy ligera, y a veces sin conocer la realidad de Tierra del Fuego. Por lo menos muchos de los funcionarios lo han demostrado así. En este último tiempo hemos sido atacados concretamente, algunos como el ministro de Comunicaciones, llegaron a decir que Tierra del Fuego es un problema; otros que era irreal que los trabajadores tuvieran una moto, un auto, pudieran cambiar el celular o irse de vacaciones. Pero la verdad que lo que se ha logrado fue con mucho esfuerzo. Han tenido intervenciones algunos gobiernos, como en el 2009, con posterioridad a la crisis del Estado norteamericano, cuando nosotros salimos a impulsar la modificación de los impuestos internos y logramos que noviembre de ese año se aprobara la ley 26.539 que trajo un crecimiento en los puestos de trabajo y en los niveles productivos.
Entre el 95 y 97% de los electrodomésticos que se consumían en el país hasta diciembre del año 2015 pasaban concretamente por mano de obra fueguina. Esa realidad se está viendo amenazada. Y se ha planteado, sin saber muy bien qué es lo que significa, el cambio de la matriz productiva. Pero la electrónica, como otras industrias, tiene mano de obra intensiva, lo que no podrá ser reemplazado por la pesca del salmón o por el trabajo en la madera o en la turba.
- ¿Qué tiene que pasar para resolver esta situación en Tierra del Fuego y quién la tiene que resolver? ¿El gobierno provincial de Bertone, el gobierno nacional…?
– Nosotros lo que estamos impulsando en la provincia es unificar criterios para ir todos los representantes de los distintos sectores con un único discurso -porque también es cierto que, lamentablemente, hay distintas posiciones-, a reclamarle al gobierno nacional que se sigan manteniendo las condiciones que existían previamente al 10 de diciembre en cuanto a la defensa de la industria nacional, en particular la de Tierra del Fuego.
Está claro que con la quita de aranceles a la importación se abre una puerta que nos retrotrae a los años 90 o incluso a la época de la dictadura cuando aún existiendo esta ley los puestos de trabajo no se generaban o desaparecían como consecuencia de la apertura indiscriminada de las importaciones y las dificultades que tiene cualquier empresa.
Los empresarios no tienen ningún tipo de problema porque finalmente decidirán una vez más convertirse en importadores y de esta manera mantener sus ganancias. Acá el problema lo tenemos los trabajadores. Y hemos denunciado que estamos ante una amenaza puntual de pretender expulsarnos de Tierra del Fuego.
Una de las políticas del gobierno actual en connivencia con las empresas es que se han llevado adelante censos para tratar de identificar las características poblacionales de Tierra del Fuego, los lugares de donde viene originalmente cada uno de los habitantes para intentar regresarlos a sus provincias.
La verdad es que es lamentable, cuestionable y repudiable. En ese marco nosotros ahora vamos a reunir al congreso de delegados para evaluar incluso la posibilidad de profundizar medidas.
Fuente: https://notas.org.ar