|
“Los reducidos ajustes tarifarios otorgados por las industrias durante este año, no llegan a cubrir las mínimas expectativas inflacionarias, a lo que debe sumarse el justo incremento salarial a choferes de los meses de septiembre y noviembre”, señala el comunicado de Atlara.
La entidad advierte que “la falta de recomposición tarifaria desde hace varios años con un permanente arrastre de pérdidas, la mayoría de las empresas no se encuentra en condiciones de poder seguir pagando los salarios a sus trabajadores y menos aún de renovar la flota”.
Atlara denuncia que el desfasaje en las tarifas que están percibiendo los transportistas, “entre un 40 y 50 % está incrementando y acelerando la desaparición de empresas que se dediquen a esta actividad, lo que está poniendo en riesgo la continuidad del sistema de recolección de leche”.
Además, los transportistas indican que el sector recolector de leche, “este año soportó un alto costo por roturas como consecuencia de las inundaciones sin haber logrado que les sea reconocido ese mayor costo operativo”.
La crisis terminal que viene sufriendo el transporte dedicado a la recolección de leche en tambos se ve reflejado en “la desaparición de empresas que como ocurrió en Manfrey donde una importante cantidad de camiones dejaron de prestar servicios a esa industria como consecuencia del ahogo tarifario que viene provocando, poniendo en riesgo el sistema de recolección en tambos”.
Por último, Atlara sostiene que las industrias con excepción de Sancor, “se niegan de manera permanente a abrir un diálogo institucional para dar tratamiento a la situación”, por lo que desde la entidad resolvieron reiterar por la vía epistolar el pedido de “constituir una mesa de diálogo y negociaciones para superar la situación a los fines de evitar el derrame de leche por empresas que dejan de prestar servicios y chóferes que quedan sin trabajo”.