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“Grillo Pergolessi Montelioni Roquetti, más italiano imposible”, dijo Horacio en una entrevista radial, el año pasado cuando fue a hablar de él, y no de la industria petrolera de la cual sabía tanto. Allí muchos se enteraron de sus grandes pasiones, como la música y su gusto por el rock. Incluso llegó a grabar un disco con amigos.
Oriundo de Buenos Aires, nació en el seno de una familia de clase media baja y con amigos de otros países, hijos de inmigrantes. Por el padre, que cantaba tangos, tomó el gusto por la música; por el abuelo, tenía la picazón revolucionaria en sangre.
Se recibió de Técnico Mecánico e ingresó a trabajar en Gas del Estado, y sobre fines de 1969 arribó a la Patagonia, a Pico Truncado. En Buenos Aires nuevamente, continuó sus estudios y se recibió de Ingeniero Mecánico en la Universidad Tecnológica Nacional.
En el año 1979 ingresó al Grupo Bridas y eso le posibilitó conocer, incluso vivir en otros lados, como Turkmenistán-en Asia- y recorrer gran parte de Latinoamérica.
Fue, en esta región, uno de los principales referentes de Pan American, compañía en la que ocupó varios puestos. En el año 2009 dejó oficialmente la actividad, pero eso fue solo en los papeles. Continuó activo ocupando cargos de asesor en el Ministerio de Hidrocarburos de la Provincia, docente en el IRAM, responsable de la Comisión de Calidad en el IAPG Seccional Sur y en su momento en el IAPG Central; también se incorporó como asesor en YPF siendo uno de los principales responsables del Programa Sustenta. Si dos palabras bastaran para describirlo serían tal vez “inquieto y activo”. Así era Horacio Grillo.
El domingo al mediodía la triste noticia de su fallecimiento sonaba en varios celulares. Trabajaba en Comodoro, pero vivía con su familia en Puerto Madryn. Las anécdotas de Horacio, los buenos momentos que dejó, serán imborrables. Desde el IAPG se despide a uno de sus socios, pero sobre todo al amigo.
“Hay momentos especiales en la vida que siempre quedarán marcados en nuestros corazones, esos donde los amigos aparecen para abrigarnos y comprendernos…. Amaré, amigo, el lenguaje de los sentidos, estaré siempre contigo, cuando todos se hayan ido…. Feliz día del Amigo, contá conmigo, a mi manera sos mi amigo”, escribió el 20 de julio pasado.
“Me considero una persona afortunada, y eso lo valoro –dijo-, cuando miro hacia atrás sé que tuve suerte, pero también uno debe ser protagonista, no solo espectador, y hay que pelearla”.