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Además, el Banco acepta como repago parte de los 700 megavatios que las centrales eléctricas producirán, recién a partir del quinto año de funcionamiento.
Para Macri las condiciones podían ser mejores. Ni bien asumió gestionó bajar la tasa de interés del 6,5% al 5,5% y su audacia le jugó a favor. Putin aceptó.
El éxito diplomático lo entusiasmó y fue por más: pidió volver a reducirla al 4.5%, muy por debajo del costo financiero que el gobierno y las provincias absorbieron en los últimos meses cuando salieron al mercado.
Molesto, Putin le pidió a sus funcionarios que Macri le solicitara a él mejores condiciones y así fue: lo llamó desde la Casa Rosada y demandó un gesto del Vnesheconombank.
“Lo voy a hablar con el ministro de Finanzas”, fue la gélida respuesta del ex agente de la KGB. Macri había sido inoportuno: llamó el mismo día que dio de Rusa Today de baja de televisión digital argentina (TDA).
Se trata de una señal de noticias en ingles transmitida desde Moscú, que Cristina sumó a la grilla en medio de la negociación por Chihuido y por expreso pedido de Putin, quien la llamaba cordialmente por su nombre.
Sin esa información, Macri fue a la reunión del G20 en Beijing dispuesto a negociar con Putin cara a cara, pero no le fue bien. “Háblenlo con mi ministro de Finanzas”, reiteró el presidente ruso, esta vez frente a la delegación argentina.
Como era de esperar, el funcionario ruso no agilizó los trámites. “Vamos a estudiarlo. Queremos revisar si vamos a destinar los fondos a esta obra”, cerró el diálogo.
Los empresarios del consorcio argentino estallaron en cólera. Algunos, aún le reprochan a De Vido permitir el ingreso de Eurnekián y no apurar el inicio de la obra con alguna empresa amiga.
Pero los rusos pidieron la presencia del empresario armenio, por considerarlo un vecino. Su relación con Macri tampoco comenzó bien: el presidente le recrimina un supuesto apoyo a Daniel Scioli y amenaza con quitarle la concesión de los aeropuertos.
La última esperanza del Gobierno para reactivar Chihuido será entre miércoles y jueves, cuando Alfonso Prat Gay se reúna con su par ruso en Washington, durante la cumbre del FMI y el Banco Mundial. Tal vez deba aceptar una tasa menor a la exigida por Macri. Fuente: La Política Online
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