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Durante dos días, se desarrolló la marcha “Por el agua y por la vida” desde la localidad de Jáchal hasta la capital de San Juan, con el fin de exigir "el cierre de la mina, la remediación del pasivo ambiental que originó y la prohibición para que se instale otra explotación minera" en la zona.
Convocados por la Asamblea Jáchal No Se Toca, que desde hace un año se manifiesta en reclamo del cierre de la mina Veladero que opera la canadiense Barrick Gold, la columna de vecinos caminó 170 km, sumando adhesiones en distintas paradas intermedias. Portando banderas y pancartas con consignas en contra de la minería, medio millar de jachalleros se nuclearon a las 6 de la mañana del domingo en la Plaza central de la ciudad y alrededor de las 9.30 del día siguiente llegaron al casco de la capital provincial.
“Largos kilómetros nos esperan en un día que promete calor, pero la fuerza crece paso a paso”, escribían por las redes sociales los manifestantes. También por esa vía, comunicaron que recibieron el apoyo de Adolfo Pérez Esquivel con un mensaje en el que pidió "que se respete el derecho a la democracia y que se respete el pedido del pueblo".
En la ciudad de San Juan, pasaron por la puerta de la Facultad de Ingeniería, donde dedicaron comentarios y cánticos dirigidos a las carreras de minería que se dictan en la alta casa de estudios. “No se vendan, protejan a su pueblo. No se comprometan con las multinacionales”, decían.
También, acudieron hasta el juzgado que atiende la causa por el derrame de solución cianurada en Veladero, marcharon hasta la plaza 25 de mayo, para finalizar terminamos en Casa de Gobierno, donde entregaron un petitorio al gobernador Sergio Uñac. “Respeto su opinión pero no hay marco para proceder el cierre de la mina, por lo menos lo que tenemos hasta la fecha”, dijo el mandatario, reiterando su visión de "tener minería en San Juan".
La marcha se llevó a cabo paralelamente a que este lunes llegaron a Veladero dos inspecciones; una a cargo del juez Pablo Oritja y otra encabezada por el ministro de Minería, Alberto Hensell, con el fin de investigar lo sucedido y evitar posibles futuros derrames.