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Inversiones en la gran minería
Ante la incertidumbre de que se produzcan drásticos cambios en la economía mundial el refugio lo ofrece el sector.
El dinámico mundo de los negocios es seguido con atención por los inversores ante la posibilidad de cambios políticos que alteren los mercados, con los riesgos que implica en la economía mundial. Los refugios para asegurar rentabilidades plantean también dificultades y sospechas de legitimidad en las operaciones fiscales de ultramar y ante estas encrucijadas los grandes capitales apuntan hacia los metales preciosos.
La gran minería, como la desarrollada en San Juan, es la beneficiaria directa de este giro inversor mundial con un efecto multiplicador en la economía local por el valor agregado en insumos, servicios y mano de obra calificada. Por ello, durante el primer trimestre de este año, la empresa de Soros compró más de 19 millones de acciones de Barrick Gold Corp., con presencia en Veladero, según documentos regulatorios, lo que la convirtió en su mayor posición accionaria a fines del trimestre. Desde entonces, esa inversión ha ganado más de 90 millones de dólares de acuerdo a informes de los mercados. Se suma este negocio a la compra de un millón de acciones de la minera Silver Wheaton Corp., una posición que creció 28% en lo que va del segundo trimestre, mientras el valor del oro ha subido 19% en lo que va de este año.
Igual que Soros, varios fondos de inversión han ingresado a la minería metalífera, en particular del oro, en el plano internacional, en tanto buscan otras alternativas en ese sector más rentables todavía, por ejemplo el litio, con un futuro extraordinario por las múltiples aplicaciones en la electrónica y la industria avanzada. La Argentina tiene una de las mayores reservas de litio del planeta, con una meta de extracción de 17.500 toneladas anuales de carbonato de litio, solamente en la puna jujeña.
El futuro de la diversificación de la economía del país se encuentra lejos de la pampa húmeda, donde se concentra la generación de la principal riqueza. Mal que le pese a los detractores ideológicos, la minería se fortalece como motor del desarrollo.
Fuente: http://www.diariodecuyo.com.ar/